Violet
Violet era de menta. Una flor entre otras de otro tamaño y de variado color. Era una joven inexacta, de tez dorada por el sol y claro zafiro por la luna. Las estrellas la denominaron "Menta", ya que cuando la reflejó una planta, la convirtió en una niña de esmeraldas ilusiones. Su madre, Malva, tierna, pero solitaria mujer. Le había dejado a su hija sus ojos, violáceos, oscuros con el día; claros y místicos por la noche. También le donó la fuerza de su pelo, más resistente incluso que las telas de araña; hasta tal punto, que cuando uno de ellos se caía o sin querer se lo arrancaba, Violet se lo prestaba a sus amigas arácnidas para fortalecer sus viviendas. Sus cabellos eran anaranjados con ramificaciones rubias que los clareaban y con ramajes rojos que acababan prendiendo su sombra. Llevaba casi siempre una diadema de flores azules y blancas orquídeas que trazaban numerosas y salvajes sombras indomables en cada uno de los pasajes del cielo. Le gustaba mirarse. Mira
Si es que es un estilo admirable o mejor diría que envidiable. Los admiradores más bellos pueden ser cían uro. De nuevo me quedo satisfecho con un trabajo tuyo, creadora.
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